Igual modalidad, similar descripción del ladrón que pretende robar celulares en locales.
Una situación muy difícil ha tenido que vivir la Profesora Gabriela Nievas en la noche de este lunes, quien sufriera un intento de robo en su salón de danzas, donde una persona de sexo masculino con la cara tapada, encapuchado, mediante el uso de una arma blanca pretendiera sustraerle sus objetos, reflejado esto a través de las redes sociales a los pocos minutos de acontecido esto.
“Recuperándome de lo vivido” señalaba en comunicación telefónica con FM Real en el programa “La Vida Real” que conduce Fabio Rodríguez, “a las 21 hs finalizando la clase y al momento en que se retiraba la última alumna, cuando quiero guardar mi computadora ya en ese momento el sujeto estaba dentro” sostenía la profesora, agregando “no entendía nada, porque sacó un cuchillo, se acercaba y me pedía el celular”
“Le pedí que se fuera”
Teniendo presente ese mal momento vivido, continuaba “yo no lo tenía encima al celular mientras el me hincaba con el cuchillo, yo le pedí que se fuera y parecía no creerme que no tenía el teléfono”
Consultada sobre la edad aproximada del sujeto y su fisonomía, aclaraba “tendría unos 23 años, tenía una capucha colocada, tapada la boca hasta la nariz y solamente se le veían los ojos, es de contextura delgada y vestía ropa oscura”
“Sólo quería el celular”
El pedido del caco era solo uno, según lo relatado “solo quería el celular, porque pudo llevarse el parlante, la computadora o la moto misma”
Agregaba Gabriela sobre uno de los momentos más tensos por los que debió vivir, “me quiso encerrar en una cocina que tiene el salón y allí entré en pánico comenzando a gritar y salieron los chicos que alquilan en departamentos de atrás y en ese momento sale del local corriendo y los chicos detrás” a la vez que recordando lo acontecido, era gráfica en su relato “los chicos avisaron de inmediato a la comisaría y muy rápidamente se acercaron los policías y demostrando muy buen accionar saliendo a buscar a esta persona, siempre predispuestos y por eso mi agradecimiento a los policías como a los chicos que salieron en mi defensa”
“Como me pasó a mí, puede pasarle a otros”
Reflexionando sobre lo acontecido, la joven expresaba “en un momento dudé en publicar, pero hay muchos negocios donde las personas que trabajan allí tienen sus celulares, y así como me pasó a mí le puede pasar a cualquiera de ellos, son momentos que no se lo desea uno a nadie y creo no me voy a olvidar nunca más porque el miedo no se va”
“Jamás pensé que me iba a pasar, no esperen a que les pasen para colocar llave en los locales, hay que tomar conciencia y recaudos para sentirnos un poco más seguros nosotros” finalizaba la joven con un valedero testimonio.